acerca de la construcción de éticas en la democracia - marcelo del giorgio

la voz del pueblo - 25/07/2013

carta de lectores: "¿Todo está como era entonces?"

Envió Marcelo Delgiorgio

 

Señora directora:
"Desde un enfoque cognitivista y constructivista del aprendizaje, para Piaget, la formación de la conciencia moral no se explica por la simple influencia del medio ambiente ni por procesos innatos, sino por la construcción activa del sujeto moral a través de la interacción social con otras personas. Las relaciones de presión adulta, de autoridad y de respeto unilateral hacia las normas crean heteronomía, mientras que las relaciones de cooperación entre iguales y de respeto mutuo crean autonomía moral."
A partir de esta cita quisiera expresar alguna consideración de la construcción de éticas en la democracia. La democracia es un sistema que no es perfecto, pero ha resultado ser un sistema más apto que otros para la construcción de igualdad: una situación donde todos tendrían las mismas posibilidades de desarrollo integral. Pero esa situación se va construyendo, a partir de la participación de los distintos sectores que integran el tejido social, una participación que reclama un camino hacia la autonomía, entendida ésta como la capacidad de tomar decisiones sin intervención ajena. Mientras la heteronomía, refiere a la acción que está influenciada por una fuerza exterior al individuo.
De hecho, hay cuestiones que no podemos elegir libremente, porque recibimos, socialmente, condicionamientos concretos. Recibimos el lenguaje que utilizamos, y se torna una condición necesaria para la comunicación en nuestros contextos sociales. Pero sí, como seres autónomos, podemos elegir como realizamos esa comunicación.
En la construcción de una mejor democracia creo que debemos hacer coincidir lo que se declama, lo discursivo, con la acción. De otra manera, construimos redes heterónomas donde algunos imponen desde su posición, ejerciendo violencia sobre aquellos que no tienen posibilidad de superar esa imposición.
Cuando uno declama democracia, debe simplemente, poder dar a todos las mismas posibilidades, ya que esa es la esencia de la democracia. Pero si construye un privilegio para unos y una exclusión para otros; esta subvirtiendo el sentido de lo que declama.
Además, quienes se benefician de ese privilegio, se tornan cómplices de esa imposición. Porque no se puede obviar el compromiso con la acción realizada, que impone su carácter a los agentes activos y pasivos de esa imposición, ya que hay otras posibilidades de elección para los participantes.
Obviamente, me estoy refiriendo a la decisión que determinó que la lista 4, encabezada por Benicio Arias no puede ir con la adhesión a la lista de candidatos provinciales y nacionales, restringiendo su derecho de asociación.
La construcción de la democracia se hace a partir de las acciones que permiten la relación de cooperación entre iguales e implica una labor docente permanente, ya que las acciones que se realizan son la didáctica que conduce al aprendizaje de las nuevas generaciones. Si la enseñanza es "subordinación y valor!" seguiremos añorando viejos y tristes tiempos, y no elaborando autonomías que permitan el desarrollo de ámbitos emancipatorios.
En una película que ví hace poco tiempo, algunos de sus protagonistas repiten esta frase: "Mientras haya esclavos todos seguiremos siendo esclavos". Es la identificación con los que necesitan la libertad la que gesta la grandeza de una construcción política nueva.
Si no tenemos la capacidad de resistir a la colonización del sistema en nuestras vivencias más inmediatas; si quienes se dicen representantes de una década ganada no pueden transmitir nuevos valores, no hemos avanzado nada; y lo que queda, es la frase con que Mario Ceriani titulaba su columna "De entrecasa", allá por julio de 2005 (¡!), refiriéndose a las situaciones políticas de aquel momento: "Todo está como era entonces".