El faro y una vista diferente de Claromecó
A punto de cumplir 90 años y luego de haber tomado trascendencia nacional a partir de la publicidad realizada en 2011 por la empresa Claro, es uno de lugares más visitados por los turistas. Desde su cima, todo se percibe de una manera distinta
El faro puede ser visitado por el público durante todo el año los días martes, jueves y sábados, en el horario de 10 a 12 y de 15 a 19, con entrada gratuita
Si bien en Claromecó se caracteriza por contar con diversas atracciones naturales que son motivo de elogios por parte de los turistas, también hay lugares donde la mano del hombre fue necesaria para la construcción y edificación de espacios que deleitan a más de uno.
Entre esas construcciones se encuentra el faro, que se relaciona estrechamente con la reciente y no tanto rica historia de la principal localidad balnearia del distrito de Tres Arroyos.
A su vez, la estructura se muestra como uno de los principales íconos que los turistas -sobre todo los foráneos- tienen en su agenda al momento de efectuar una actividad de recreación.
Su principal función es servir como punto de referencia a las embarcaciones de gran tamaño que circulan por las aguas de esta región. El faro está a cargo del Servicio de Hidrografía Naval, que cuenta con personal durante todo el año en Claromecó.
A punto de cumplir 90 años de existencia -fue construido el 20 de octubre de 1922-, es uno de lugares más concurridos por los turistas, más aún cuando el verano pasado fue utilizado por la empresa Claro para la realización de una publicidad que fue vista en todo el país.
Desde la cima del faro todo se percibe de una manera diferente. Los distintos tonos del color azul intenso del mar, sumado a los diferentes verdes que otorga la flora claromequense, hace más que notoria la idea de un paisaje excelente para que los turistas se deleiten y puedan sacar más de una fotografía.
Fue de playa, pero...
Durante la mañana de ayer, LA VOZ DEL PUEBLO se acercó hasta donde está apostado el faro y pudo apreciar la importante cantidad de familias que visitaron el lugar.
Más allá de que la jornada era más que propicia para estar al lado del mar, muchos turistas llegaron hasta el lugar para experimentar las sensaciones que significa subir hasta la cima para observar, casi en simultáneo, la extensa forestación por un lado, y las amplias playas, por el otro.
En forma generalizada, las cámaras digitales o teléfonos celulares fueron los medios tecnológicos por excelencia que fueron utilizados por los concurrentes, quienes guardaron en la memoria de los mencionados aparatos imágenes que resultan difíciles de explicar con palabras.
De todo el país
Tal como es costumbre en esta época del año, Claromecó es visitado por turistas de todo el país, quienes viajan cientos de kilómetros para disfrutar de las bondades naturales y artificiales que brinda la localidad.
Pablo Casucelli es oriundo de Banfield y junto a su familia -compuesta por su esposa Rosana Polito y sus hijos, Ramiro (3) y Maitena (9)- contó a este diario las sensaciones que tuvo luego de bajar desde la cima del faro.
"Fue algo muy lindo y me parece una actividad que no hay que dejarla de lado. Nunca antes había subido a ningún lugar de este tipo", señaló. Agregó: "Esto es muy característico de la zona. Te das cuenta lo lindo que es cuando mirás desde arriba, ya que cuando estás abajo es una cosa totalmente diferente. Nosotros estamos parando en el camping y cuando da la luz en los árboles es algo muy pintoresco".
En tanto, el visitante procedente de Banfield se preguntó con sorpresa cómo es que hicieron la construcción. "Me llama la atención la forma en que fue edificado, al igual que la manera de los escalones. Uno cuando sube tiene un poco de vértigo y eso que tiene las barandas, así que no me quiero imaginar lo que habrán sentido los que lo hicieron en su momento", destacó.
"Sin dudas es algo que recomiendo hacer. Nosotros hemos venido en otras temporadas y se nos pasaban los días. Lo íbamos dejando pasar y nunca veníamos, pero este año decidimos venir", expresó en el fin del diálogo.
Por su parte, las sensaciones de la familia Salvador, procedentes de Venado Tuerto, provincia de Santa Fe, también quedaron reflejadas luego de subir los 278 escalones que tiene el faro.
Brígida Griffín, esposa de Rubén Salvador, indicó que "fue algo precioso. Hace dos años intenté subir pero no pude, llegué a la mitad y me volví", recuerda la turista entre risas. "Esta vez vine decidida a subir y es una sensación hermosa. De arriba es una vista espectacular. Por suerte pudimos sacar un montón de fotos para que nos quede el recuerdo del hermoso paisaje", mencionó.
Desde La Plata
Desde la conocida ciudad de las diagonales también hubo sensaciones más que positivas luego de experimentar una vista desde 54 metros de altura. Las familias Ronaszkiewicz y Angheben están de vacaciones en Claromecó y se unieron para compartir las sensaciones propias que producen subir hasta la cima del faro.
El pequeño Martín Ronaszkiewicz manifestó que "estuvo muy buena y es bastante interesante. Esta es la quinta vez que subo. El paisaje que se ve desde arriba es lo más lindo y por eso es que saqué un montón de fotos".
Por su parte, Enrique Angheben sostuvo que "estuvo muy bien. Tuve que hacer un camino y medio porque a la mitad del trayecto tuve que bajar a mi hija, pero luego pude subir y estuvo muy bueno. Me lo había imaginado más chico, por lo cual tenía un poco de temor pero de todas formas se sube y baja muy bien".
"Admiro a la red de faros que lo construyó, a quienes los edificaron", agregó Angheben de profesión ingeniero, quien añadió que "la vista que tiene es imponente y hermosa. Ya había subido al faro de San Clemente, que es un poco más bajo".
Asimismo, puntualizó que "es una actividad para aconsejar. Es sorprendente con la facilidad que suben y bajan los chicos. También recomiendo a Claromecó en general, que tiene unas playas envidiables".
Datos
Ubicación geográfica: latitud 38º 49' Sur y longitud 60º 02' Este.
Altura: 54 metros.
Alcance luminoso: 25,9 millas marinas (unos 50 kilómetros).
Características de la torre: cilíndrica troncocónica de mampostería de cemento.
Escalera: tipo caracol de 278 escalones.
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