lanueva.com - 27/01/2013
los faros y hoteles de nuestras costas
El libro, de dos tomos, rescata con textos e imágenes inéditas el patrimonio historico y cultural que cobija esta zona del Atlántico Sur.
"Hoteles y Faros, Monte Hermoso-Claromecó y Reta" lleva por título el último trabajo del licenciado Nicolás Ciarniello, una obra compuesta de dos volúmenes que permite conocer a fondo varios capítulos apasionantes de la historia costera regional, desde el distrito de Tres Arroyos hasta la desembocadura del río Negro.
La publicación, que ya se encuentra a la venta en varias librerías locales y de la zona, reúne un total de 240 páginas con profusas ilustraciones y fotografías, muchas de ellas inéditas, que contribuyen a ofrecerle al lector una propuesta tan didáctica como amena.
El primer volumen lleva por nombre "El hotel de madera de Monte Hermoso y los hoteles que dieron origen a Claromecó y Reta".
Allí el autor desanda la historia que tuvo origen en marzo de 1917, con el hundimiento de la goleta "Lucinda Sutton" en las costas del actual balneario Monte Hermoso, capítulo de la historia regional que algunos años antes ya había abordado detenidamente en otro trabajo denominado "Monte Hermoso, del País del Diablo a la autonomía".
En su obra actual, Ciarniello describe los vaivenes seguidos por la carga de tablones y tirantes de pino que transportaba el buque hasta la construcción e inauguración del hotel de madera, a la que concurrió lo más selecto de la sociedad bahiense y también de Coronel Dorrego y Punta Alta.
Tras una minuciosa descripción del interior y exterior del edificio, el trabajo ofrece varias imágenes de aquellos años hasta llegar a su etapa final, en la década del '50, sumido en el olvido y sepultado por la arena.
Luego el libro alude a la historia de Claromecó y Reta, que curiosamente tuvieron un origen parecido al de Monte Hermoso, cuando a principios del siglo XX algunas familias provenientes de poblaciones cercanas se acercaban a la costa para pasar el día y disfrutar del agua de mar.
"Las grandes distancias recorridas hicieron sentir la necesidad de contar con algunas instalaciones para poder quedarse algunos días en los meses de verano", explicó Ciarniello.
Según el trabajo, el primer hotel de Claromecó (1901) fue un galpón de chapa y madera con techo a dos aguas, dividido en su interior por tabiques de yute, mientras que el majestuoso Hotel Playa, inaugurado en 1929, con 35 habitaciones, fue el primero en Reta.
El segundo tomo, que lleva por nombre "El Faro Recalada de Monte Hermoso y los faros Claromecó, El Rincón y Segunda Barranca" constituye toda una invitación a valorar esta parte preciada de nuestro patrimonio cultural.
Buceando en la historia, reuniendo referencias y documentos de distintas fuentes, Ciarniello logró ofrecer una publicación orientada a describir los principales faros de la costa regional.
Comienza mencionando a la Farola Monte Hermoso, el primer faro terrestre del litoral atlántico argentino, en el sitio geográfico conocido como Las Rocas, y que nada tiene que ver con la actual localidad balnearia homónima, ubicada mucho más al este.
También alude al pontón faro "Bahía Blanca", que comenzó a prestar servicios en 1894, entre otros, para abocarse con lujo de detalles a los faros Recalada, Claromecó, El Rincón y Segunda Barranca.
"Hoy, como entonces, sus luces siguen iluminando el rumbo de miles de buques. Actualmente son señales de seguridad y también señales culturales, alrededor de las cuales hemos construido nuestra memoria común y esto es lo que, precisamente, deseamos reflejar en las páginas del libro", señaló Ciarniello.
El autor
Buceando en la historia, reuniendo referencias y documentos de distintas fuentes, Ciarniello logró ofrecer una publicación orientada a describir los principales faros de la costa regional.
Comienza mencionando a la Farola Monte Hermoso, el primer faro terrestre del litoral atlántico argentino, en el sitio geográfico conocido como Las Rocas, y que nada tiene que ver con la actual localidad balnearia homónima, ubicada mucho más al este.
También alude al pontón faro "Bahía Blanca", que comenzó a prestar servicios en 1894, entre otros, para abocarse con lujo de detalles a los faros Recalada, Claromecó, El Rincón y Segunda Barranca.
"Hoy, como entonces, sus luces siguen iluminando el rumbo de miles de buques. Actualmente son señales de seguridad y también señales culturales, alrededor de las cuales hemos construido nuestra memoria común y esto es lo que, precisamente, deseamos reflejar en las páginas del libro", señaló Ciarniello.
El autor
El profesor y licenciado en Historia Nicolás Ciarniello se desempeña como docente de los niveles Medio y Terciario. Es autor de "Julio César Avanza, un homenaje demorado"; "Sociedad y naturaleza en Bahía Blanca"; "Centenario de la Escuela Superior de Comercio", "La década del 45" y "Monte Hermoso, del País del Diablo a la autonomía", además de varios artículos públicados en la revista "Todo es Historia".
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