domingo, 17 de febrero de 2013

balance ambiental en la albúfera de reta, horacio ramírez

la voz del pueblo - 17/02/2013
Balance ambiental en la albufera

Escribe Horacio Ramírez

La naturaleza no es una entidad existente más allá de lo que cada hombre, en su cultura y contexto social, considera que es. En nuestro ámbito, lo natural es algo, si no contrapuesto, por lo menos complementario de lo cultural. Hoy más que nunca, hemos llegado a alguna clase de límite en cuanto a la capacidad de lo natural de absorber los excesos de lo cultural. En ese límite, podemos considerar toda una batería de argumentos técnicos para explicar el estado de las cosas, pero -y desde hace algunos años- también es necesario definir ese límite por la vía de lo moral. Ya no alcanza saber si el sistema natural es capaz de "perdonar" nuestro crecimiento: ahora se hace imprescindible cuestionar el perfil ético que define nuestra relación con lo ambiental.

En este sentido, debemos preguntarnos acerca del valor moral que tiene, por ejemplo, declarar a la albufera de Reta un paisaje que debe ser protegido y no tomar ninguna medida al respecto. El problema no es, obviamente, de génesis natural, sino que surge de la respuesta que una sociedad se da a sí misma. El problema es el grado de coherencia entre lo que se declama y lo que se hace en el terreno de los hechos o, en pocas palabras: el grado de respuesta moral que nuestras instituciones públicas nos dan a quienes les delegamos la autoridad pública.

Durante el último concurso de pesca (actividad primitiva y cruenta contra los animales que ya debería ir dejándose atrás, a pesar de los negocios que supone), la zona presuntamente protegida permaneció literalmente "tapizada" por cuatriciclos, camionetas y autos. Antes y después de esa jornada, el área siguió siendo atacada con el tránsito de más máquinas... pero el problema es ético y entonces hay que buscar el comienzo del hilo de responsabilidades... y éste siempre está en el área pública. La gente devenida en turista rompe estructuras geomórficas que llevan años en crearse; espanta a las aves (este verano, totalmente ausentes en la zona); rompe plantas; destruye guaridas de animales y mata a los que no logran escapar. Además, se debe tener en cuenta que una playa de arena no es un "arenero" hecho por una municipalidad: es un ecosistema completo con infinidad de relaciones materiales y energéticas que se ponen inútilmente en riesgo... y esto a través de ruidos de motores y sucesivas gotas de lubricantes, combustibles, líquidos de freno, etc.

La respuesta ambiental que la zona exige, entonces, debe ser moral: definir una coherencia en la conducta entre lo que se declara a escala municipal y provincial y lo que se hace en el lugar. Si se declama interés por lo ambiental como reaseguro de protección del capital turístico de una comunidad, entonces deberían ponerse a trabajar en ese sentido. Ante todo, educar a los funcionarios acerca del futuro de desastre ambiental que se cierne sobre el sitio, más allá de los negocios inmobiliarios que se puedan hacer. Luego, disponer presupuestos coherentes con el interés que se exhibe en las declaraciones públicas. Y, finalmente, desarrollar sistemas de educación al turista por medio de cartelería y folletería sistemáticas y presencia en el lugar de guardafaunas y personal debidamente preparado.

El turista llega a un sitio desolado y lo invade porque nada lo precave en tal sentido. La experiencia indica que, debidamente informado, el turista enseguida colabora, informándose y educando a su vez.
El problema desatado en la albufera de Reta es de coherencia social, o sea: de naturaleza moral, y cuya resolución reclama madurez de todas las partes involucradas... De parte de las autoridades, sobre todo, que son las primeras responsables de la incoherencia que genera el conflicto ambiental.
Entender, de una vez, que la excesiva distancia entre lo que un funcionario declama y lo que hace es lo que, comúnmente, se llama insulto público... y ni el habitante de Reta ni el turista merecen ser insultados de esta manera. (Foto de albuferadereta.blogspot.com)



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