jueves, 13 de diciembre de 2012

asalto a comerciante local

la voz del pueblo - 13/12/2012
Indignación tras el asalto a la mercería

Es el segundo caso en el que personas disfrazadas de miembros de fuerzas de seguridad protagonizan un atraco violento en la localidad

EL LUGAR DONDE FUE PERPETRADO EL ASALTO EN LA TARDE DEL MARTES (Carolina Mulder)

Mientras la policía de Claromecó y la Fiscalía de Tres Arroyos continúan trabajando en la búsqueda de pistas que permitan echar luz sobre el robo en el que los delincuentes actuaron disfrazados de policías; el marido de la víctima lamentó lo sucedido y no ocultó su preocupación por el episodio que le tocó vivir a su esposa en la tarde del martes.
Según expresó Horacio Maccelari en medios radiales, su esposa Mónica Inés Aristemuño, lo llamó por teléfono cuando logró zafarse de las ataduras y, al llegar a su domicilio, el hombre constató la dramática experiencia vivida por su esposa.
"Creo que no la mataron de milagro, tenía encintada hasta la nariz y no podía respirar, esto es un desastre", dijo Maccelari antes de compartir su indignación, "lo único que hacemos es trabajar y nada más que eso. Uno se acostumbra a esto. Fue la policía (a investigar) y después te conformás con que no te hicieron nada".
Más adelante, Maccelari dejó trascender que los uniformes utilizados podrían ser de la Policía Federal, "evidentemente no era gente de acá. Eran dos morochos, bien vestidos. Mi esposa todavía no sabe ni lo que le pasa", agregó.


El atraco a la mercería de Mónica Aristemuño ocurrió el martes alrededor de las 18, cuando dos delincuentes disfrazados de policías ingresaron al local y, luego de obligarla a trasladarse a su casa ubicada junto al negocio, en la calle 32 entre 23 y 25, la ataron y amordazaron para reducirla antes de robarle 10.000 pesos y el teléfono celular. Al mismo tiempo, testigos ocasionales, afirmaron que habría otras dos personas que se movilizaban en otro vehículo, por lo que no se descarta el accionar de una banda de delincuentes.

Este es el segundo caso consecutivo en el que personas disfrazadas de miembros de fuerzas de seguridad protagonizan un asalto violento en Claromecó.
En ese sentido, cabe recordar que en la madrugada del domingo 1 de julio, Carlos Milani fue sorprendido en su casa por un grupo fuertemente armado, los cuales estaban vestidos con indumentaria militar con similitud a la policial, quienes tras reducir al dueño de casa y sus invitados, se llevaron una cantidad no precisada de dinero en efectivo, sin que hasta el momento hayan trascendido avances en la investigación del caso.




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