resbalarse en claromecó

la voz del pueblo - 12/02/211
Cartas de lectores
Carta abierta a la comunidad

Me llamo Raúl Roberto Alvarez, soy residente de Claromecó desde 1997, aquí inicié, me animaría a decir, una nueva vida, lejos del ruido y de la inseguridad de las grandes urbes, y en poco tiempo me sentí identificado con el lugar, que comencé a amar y respetar, al igual que todos los claromequenses, como quise y quiero una ciudad pujante y próspera, junto con otros vecinos, en varias oportunidades hicimos los pertenecientes reclamos ante la delegación municipal a los efectos de que se implementaran las obras de infraestructura necesarias para evitar que en épocas de lluvias se formasen verdaderas lagunas en muchas de las calles de nuestra querida comunidad.
Todo este preámbulo lo hice para poner en contexto un hecho que paso a referir, el domingo 16 de enero de 2011 a las 9.30 hs. aproximadamente; sufrí un accidente en la vía pública, en ocasión de querer ingresar a una vivienda de mi propiedad, sita en la calle 27 esquina 40, estando la arteria inundada al igual que la vereda, teniendo ésta una altura aproximadamente de 20 cm. de agua, me resbalé, caí y, lamentablemente, me fracturé la rodilla, y si no soy asistido por los bomberos y vecinos hasta pude haberme ahogado. Posteriormente fui intervenido quirúrgicamente en el hospital de Tres Arroyos, con un posoperatorio de 6 meses.
Se me dirá que tuve mala suerte, o que fue culpa del destino... nada de eso. Fui víctima de la desidia, la negligencia y la omisión de las autoridades públicas, que no escucharon los reclamos, que como dije veníamos formulando los habitantes del barrio.
Yo espero que, a partir de este suceso, los que no gobiernan tomen conciencia de la gravedad de la situación y del peligro que ello significa de cara a futuras precipitaciones.
No podemos ni debemos permitirnos tomar sólo como un hecho de la naturaleza el anegamiento de nuestros caminos. Esta problemática exige soluciones de fondo de aquellos que tienen responsabilidades institucionales.
para decirlo de otro modo: Sra. delegada: quiero ingresar a mi casa en un día de lluvia como una persona normal en esa circunstancia, esto es: provisto de un paraguas, no munido de un equipo de hombre rana.
Ya se cumplió una década del siglo XXI, estamos en el tercer milenio, en pleno auge tecnológico a través de la telefonía móvil, la TV digital y el Internet y usted nos quiere gobernar como si estuviéramos en el siglo XIX, en época del sulky y la carreta ¿no le parece que es una manera de ahuyentar a los turistas y que es deber suyo realizar las obras para que el agua drene, fluya, para que se desagote? Para eso pagamos los impuestos, para que gestione y se comprometa con los ciudadanos, así como también averiguar ¿cómo continúa la salud del ciudadano accidentado en las arterias 27 y 40 de la cual usted estaba notificada?, y no sólo para la foto de un diario o para la imagen de un canal local.
Para finalizar, espero que mi carta tenga algún eco y se realicen las tareas necesarias para que Claromecó no sólo nos cope en un spot publicitario, sino fundamentalmente, en el diario vivir, que es lo más importante. Lo dice una persona muy identificada con este centro turístico, que promociona el lugar, a través de sus artesanías (los faros), en fin, el gordo de la 25.

Raúl Roberto Alvarez
LE 7.765.934