la voz del pueblo - 17/09/2011
Huinca Loo: la lluvia trajo el alivio esperado
El incendio en la Forestal Huinca Loo tuvo su esperado final. Después de una noche agitada, con vientos de 70 kilómetros que extendieron las llamas a la zona del balneario, haciendo volar cenizas prendidas que encendieron los médanos de zonas vecinas y causaron alarma en vecinos preocupados que llamaron en forma incesante a las oficinas de la delegación y el cuartel de los servidores públicos, finalmente una lluvia de 24 milímetros se encargó de apagar las llamas y extinguir definitivamente el siniestro iniciado el pasado 31 de julio.
"Hemos corrido como locos toda la noche, pero nunca perdimos el control, aunque por momentos se veía feo", recordó el comandante Roberto Héctor, titular del Cuerpo de Bomberos de Orense a LA VOZ DEL PUEBLO, al referirse al final de un trabajo de más de 40 días.
"La lluvia era la única forma de extinguir un fuego que, con la acción del viento, se hacía cada vez más amenazante", agregó al respecto el efectivo, quien además informó que hubo que sumar otras tres autobombas a la guardia de cenizas montada desde la semana pasada, cuando el fuego llegó a estar a pocos metros del casco principal de la estancia de los propietarios del problemático monte, donde por estas horas, las autoridades políticas del distrito exigen la creación de caminos que faciliten el tránsito en su superficie a los efectos de poder prevenir futuros siniestros.
"Hubo gente que llamó preocupada, pero estoy en condiciones de afirmar que nosotros siempre supimos dónde estábamos y con qué nos enfrentábamos", comentó Héctor en el cierre, antes de retirarse a descansar tras una inolvidable batalla contra un fenómeno de singulares características, que ayer encontró su límite con las precipitaciones del día.
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