El valor del muro costero
Por Gabriel Horacio Russo (*)
Estamos atónitos viendo el desastre que hace la erosión costera desde la avenida 42 hacia el faro y después del mismo, en las playas de Claromecó. Esto es acompañado por el descenso de la tosca que han ido colocando en la Costanera, lo que hace más difícil ver las arenas que teníamos y ponderábamos en las playas de la localidad.
La imagen que Claromecó brinda desde la avenida 42 al arroyo es bien distinta. Creemos que el murallón costero ayuda a que se pueda devolver la arena al mar y que no baje la tosca de la calle a las playas. Hay gente que no aconseja la construcción de un murallón. A ojos vistas está su conveniencia. Las diferencias en la playa: la arena sube al pueblo pasando la avenida 42 y hasta el faro. Es muy difícil devolver al mar esa arena llena de tosquilla. Las aguas pluviales por su drenaje natural también llenan de tosquila la arena. Esto hace que se estén perdiendo muchos metros del invalorable recurso de Claromecó: sus playas inmensas.
La continuación de la construcción del murallón, desde donde termina hasta el faro seria una contribución al tema. Pedimos al municipio que active los recursos a tal fin en tiempo y en forma para no perder el recurso que atrae la gente, sus playas y su paz. Ambas, si no nos detenemos a trabajar las estamos perdiendo.
(*) Presidente de la Asociación de Vecinos Interesados por Claromecó (AVIC)
http://www.lavozdelpueblo.com.ar/nota-51584-el-valor-del-muro-costero
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